LA RIADA

 Estos últimos días ha estado lloviendo mucho, hasta tal punto que el río Mijares se ha desbordado, bueno por algunas zonas claro está. Se han partido algunos árboles.

Han caído cantidad de piedras y rocas, algunas tan grandes como coches y personas, están en medio de la carretera.
Unos niños llamados Lua, Gael y Lila no han podido venir a la escuela a causa del agua que pasaba por encima de los dos puentes que tienen que cruzar para ir a su casa.
 En total en las últimas lunas han llovido 160 litros por metro cuadrado.



 

Hoy hemos hecho una excursión al río Mijares. Parecía el río de chocolate del libro (Charli y la fábrica de chocolate.)


 Adiós.

CLASE DE PATATAS

Hoy un compañero nos ha dado una clase sobre patatas.
Tenía muchos tipos de patatas pero solo le ha dado tiempo ha explicarnos estas clases:
Kennebec:
Son gallegas y tardías.Tienen un aspecto añejo y no se venden lavadas. Son buenas al horno, cocidas y fritas.

 Desirée:
Este tipo de patata es semitardía y aguantan bastante tiempo.
Es bonita, tiene la piel roja y la carne amarilla, siendo buena para todo, especialmente para cocer.

Agria:
Son de tamaño mediano-grande. Tienen una forma ovalada y alargada. Tiene poco almidón (pocos azúcares). Se conserva muy bien, tiene la piel fina y la carne amarilla. Es ideal para freir (no se deshace).

CONTINUARÁ...

No es una amenaza, solo un aviso.

LAS PATATAS

Esta mañana hemos bajado al huerto, a sembrar patatas.

Primero hemos cortado las patatas, de forma que en cada mitad quedara un brote o más, después metimos la  parte que no tenía piel dentro de un cubo con ceniza (porque la parte que no tiene piel se suele enfermar y la ceniza la protege).


Al mismo tiempo otr@s niñ@s preparaban y abonaban la tierra donde ibamos a plantar las patatas.

Mientras otro grupo regaba el huerto com abundante agua (10 regaderas cada un@).
Los pequeños han arrancado malas hierbas ( amor de hortelano, cardos, verónicas persas y fumaria).
Tal vez nos nazcan dedos, porque un niño se cortó y la patata se manchó de sangre.
 Por cierto, hay algunas cosas que os gustaría seber: Usamos estiércol de caballo y nos pusimos guantes porque el estiércol de caballo contagia el tétanos. Adiós amigos.

LA CALÇOTADA

Ayer hicimos una calçotada. Primero sacamos los calçots del huerto que habíamos estado cuidando estos meses.

 Anotamos los ingredientes de la salsa de calçot. Después encendimos un fuego y preparamos los  calçots. Empezamos a poner los calçots en las parrillas.





















 Mientras tanto estábamos haciendo la salsa.









Luego sacamos los calçots de las parrillas.

 Entre tanto habíamos hecho una fideua.  Ummmmm, todo estaba delicioso.










 Hicimos una mini-tirolina. Adiós chic@s

UN SÁBADO EN EL HUERTO

Hoy hemos estado en el huerto Clemente, Iria y Maria. Se ha estado repartiendo el estiércol por las parcelas.
Iria ha estado muy trabajadora ....

Iria ayudándose de la pala y la carretilla nueva.

Uff ... cuánto estiércol ...

Ya está bien cargado ...

Clemente lo ha estado repartiendo por los calçots, las fresas y más ...

Mientras también estuvimos haciendo fotos de algunas coliflores que están en plena producción ...

Y en todo este trabajo hemos estado acompañados por una pequeña mariposa que estaba jugueteando por allí ....

 

EL ESTIÉRCOL LLEGA AL HUERTO ESCOLAR


Hoy Nando y Clemente han ido a por estiércol de caballo que nos ha dado Chencho, un vecino del pueblo.
Los dos han estado descargando la furgoneta de Nando. Mientras Iria y Maria estaban transplantando unas plantas de menta.

Así ha quedado de bien puesto el estiércol en el huerto

Ahora nos queda empezar a repartirlo ...

ROSA DE LOS VIENTOS

Después de traer las piedras hicimos en el cuaderno de mates un boceto de la rosa de los vientos.

Para ello usamos: lápiz, goma y compás.

Ya en el huerto usamos una piedra para marcar las lineas y un palo atado a una cuerda que usamos de  compás.

 Una vez trazadas las lineas comenzamos a poner las piedras y faltaban, así  que fuimos a por más (piedras) pero antes las contamos, ¿para qué? pues para calcular cuantas piedras tenía que traer cada  un@. Al final quedamos en que cada un@ traía 30 piedras (uf) y nos llevamos las mochilas para llenarlas de PIEDRAS (aaaaah!) en marcha. Una vez en el río nos pusimos manos a la obra,  algun@s cogimos 40 hasta 50 piedras, nos sentíamos orgullos@s de nosotr@s  pero... después descubrimos por qué no teníamos que coger tantas piedras (uf, pesaban). Tuvimos que hacer muuuuuchas pausas.

 Una vez en el huerto terminamos de hacer la rosa de los vientos. Tras mucho esfuerzo la terminamos  decorándola con flores y nos quedó preciosa.