AL LLEGAR LA PRIMAVERA HEMOS DECIDIDO VOLVER A VISITAR LOS ÁRBOLES DE LOS ALREDEDORES PARA COMPROBAR QUE ESTÁN VIVOS Y QUE HEMOS ACERTADO EN SU IDENTIFICACIÓN PORQUE LO DE LOS PERALES...
NO LO TENÍAMOS CLARO DEL TODO.
Y...SÍ... ERAN PERALES
YA HABÍAN ECHADO LAS FLORES. LES QUEDABAN LAS ÚLTIMAS QUE ESTABAN MEZCLADAS CON LAS HOJAS NUEVAS.
OBSERVAMOS MUY BIEN LAS CORTEZAS. LAS DEL PERAL TIENEN SURCOS DE ARRIBA A ABAJO
Y LOS CEREZOS TIENEN LAS LINEAS DANDO VUELTA ALREDEDOR DEL TRONCO.
CONTINUAMOS NUESTRO CAMINO HACIA EL MOLINO.
NOS ENCONTRAMOS UN MEMBRILLO EN FLOR Y NOS SACAMOS UNA FOTO DEBAJO.
AL LLEGAR AL RÍO DECIDIMOS ALMORZAR.
TIRAMOS UNAS PIEDRAS AL RÍO.
Y NOS VOLVIMOS HACIA EL COLE.
EN EL CAMINO DE VUELTA NOS ENCONTRAMOS UN CHOPO MUY GRANDE AL QUE UN RAYO LE HABÍA HECHO UN AGUJERO EN EL QUE CABÍAMOS DE TRES EN TRES.
EN EL ÚLTIMO TRAMO NOS PARAMOS JUNTO A UNOS NOGALES QUE AÚN NO SE HAN DESPERTADO DEL INVIERNO.
NOS ENCONTRAMOS UNA MARIPOSA MUY BONITA PERO ESTABA CASI MUERTA Y TENÍA ENCIMA UNA ARAÑA.
¿SE LA QUERRÍA COMER?
CON ESA DUDA ACABÓ NUESTRO PASEO.